Un viejo comerciante español a quien conocí en la Ciudad de México hace muchos años para expresar sus preocupaciones por la incierta situación económica del país (me suena conocido), soltaba una frase mientras golpeaba con uno de sus índices la cubierta de madera de su mostrador: " PUES NADA MI AMIGO QUE ESTO SE HUNDE " y una vez desahogado continuaba como si nada.
Que se me hace que el personaje de la fotografía ha parido una idea semejante y ante su imposibilidad de apretarse el cinturón, a lo que nos han conminado al resto de los mexicanos que no somos de su amistad él y los acólitos de La Banda, ha optado por conseguirse un empleo adicional que le permita renivelar sus ingresos deteriorados que obtiene como gerente de la tiendita que se encarga de extorsionar y de exprimir a esta bola de borregos en que, mal suponen, nos han transformado a todos los mexicanos de segunda para abajo.
Sin embargo parece que no la tiene nada fácil porque el manager del equipo ya lo amenazó con dejarlo sólo como aguador si continúa, como hasta ahora sin llegar la bola al catcher después de mas de veinte lanzamientos.
Bueno, pues ahora resulta que ya se dió el "parto de los montes " (nada que ver con los volúmenes de alguien ). Sucedió que después de inventar todos los pretextos habidos y por haber para justificar, que no para explicar, el desmadroso batidillo de las finanzas públicas, del crecimiento negativo (me encanta este invento de los economistas ) de la economía y del empleo, del crecimiento, ahora sí, positivo de la delincuencia organizada, del narcotráfico ¿poder tras el trono?, etc., etc., se hizo la luz y ya se instrumenta de manera integral la solución : el erario público requiere de mayores ingresos y HAY QUE AUMENTAR LOS IMPUESTOS !!.
No creo posible que de entre todos los asesores, que deben ser más que los diputados y los senadores juntos, a nadie se le haya "escurrido "la idea elemental de AMPLIAR LA BASE DE CAUSANTES por una parte y por otra terminar de un plumazo con los contubernios de las ¿autoridades? hacendarias con aquellos fascinerosos de cuello blanco que cada año reciben devoluciones sustanciosas de los impuestos que enteraron en su oportunidad. Ampliar la base de causantes implica, por supuesto, meter al orden y obligar a pagar impuestos a TODO el comercio informal que nos agobia y mantiene a todas las poblaciones en condiciones de zahurdas, llámense comerciantes ambulantes choferes de cobis, de microbuses, de taxis, tianguistas de mercados sobre ruedas y cuanta fauna nociva semejante exista. Claro está que la tarea es similar en grado de dificultad a la que correspondió a Hércules cuando le encargó su patrón limpiar los establos de Augias y sacó de ellos cantidades inmensas de estiercol y otras inmundicias; hago este símil porque toda esta fauna nociva está tolerada, auspiciada y protegida por los detentadores de los tres niveles de gobierno en asociaciones vergonzantes con lidercillos de toda laya que los usan como cuerpos de choque en contra de la ciudadanía en sus prácticas delictivas de marchas, plantones y todo lo que les ocurra con tal de causar las mayores molestias a todo aquél que no tiene que ver con sus trafiques. Por lo tanto las represalias de los que se vean agraviados en sus intereses con tales medidas son de temer siempre y cuando su aplicación se pretenda que la hagan aquellos que carecen de toda autoridad moral.
En fin, que muy abusados aquellos que aún creen que ya se alcanza a ver la luz al final del tunel, siempre puede ser una locomotora...
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